Un encuentro en Madrid

32. "¿Qué tipo de creativos?" Pablo tiene curiosidad. "La semana pasada, un estudiante escribió: 'La Gioconda sonríe porque tiene un secreto. Quizás olvidó hacer los deberes.'" Elena imita una voz de adolescente. "Otro escribió: 'El arte moderno es como mi habitación. Desordenada pero cara.'" Pablo casi derrama el vino.

33. "Los adolescentes son filósofos," dice. "En la librería, solo compran novelas de vampiros." Parece serio. "Tantos vampiros. ¡A veces me miro el cuello!" Elena se ríe. Los dos están relajados.

34. "¿Puedo contarte algo gracioso?" pregunta Pablo. "¡Claro!" Elena se acerca. "Esta mañana, le di de comer al gato. Pero tenía sueño." Hace una pausa. "¡Puse café en su plato. Y comida de gato en mi taza!" Su cara muestra asco. "¡Casi lo bebo!"

35. Elena se tapa la boca. Se ríe fuerte. "¿Hemingway bebió el café?" pregunta. "¡No! Me miró como si estuviera loco. Luego volvió a la cama." Pablo mueve la cabeza. "Tenía razón. Estoy loco antes del café."

36. "¿Qué hora es?" pregunta Elena de repente. Pablo mira su reloj. Luego mira otra vez. "¿Es correcto? ¿Las cinco y media?" El tiempo voló. "¡Oh! ¡Hemos hablado durante dos horas y media!" Elena está sorprendida. "Una buena conversación hace desaparecer el tiempo," dice Pablo.

37. Terminan el vino. El café está más lleno ahora. Llegan clientes de la tarde. El camarero lento sigue siendo lento. Elena piensa en su gato. "Debo irme pronto. Picasso cena a las seis. Si llego tarde, protesta." Parece apenada.

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